Viaje al siguiente eclipse (III): Seguridad

Viaje al siguiente eclipse (III): Seguridad

Quizá, lo que más asuste de viajar a otro país es la seguridad. Los eclipses se pueden presentar en cualquier lugar del mundo, independientemente de cómo es ese lugar. El eclipse total de Sol que yo vi el 29 de Marzo de 2006 lo observé desde un hotel cerca de Antalia, una zona turística de Turquía, junto con mi pareja y unas amigas. En aquel momento, Turquía era firme candidata a entrar en la Unión Europea y era bastante segura. Solo había peligro en la lejana zona del Kurdistán. La situación política era buena, sin los sobresaltos actuales. Otros amigos decidieron ver ese mismo eclipse desde la Libia gobernada por Gadafi. Fueron escoltados por el ejército del país para repeler posibles ataques de las milicias presentes en el interior del país. La decisión de un lugar u otro, como puedes ver, es algo que tienes que valorar tú.

No quiero transmitir que ir a ver un eclipse sea peligroso. Como no sabemos cuándo estás leyendo esto, ni a dónde piensas ir y esto pretende ser una guía para refinar el lugar al que ir, no tengo más remedio que hacer que te plantees algunas situaciones a tener en cuenta.

Lo que quiero transmitir, por un lado, es que cada uno tiene que decidir si el ver un eclipse total concreto en un sitio concreto merecen los riesgos que puedan presentarse y, por otro, que el mismo eclipse, con diferente duración, se puede observar desde diferentes puntos de la superficie terrestre. Que sí, que el punto más cercano al punto de máximo eclipse, como Libia en el eclipse que comentaba arriba, con previsión de buen tiempo es lo más deseable (es lo que vimos en la anterior entrada), pero la banda de totalidad es muy larga y otros lugares pueden ser más interesantes para ti, como Antalia.

Dicho esto, indicar que la seguridad tiene dos vertientes. Por un lado la seguridad física y, por otro, la seguridad sanitaria. Con seguridad física me refiero a protegerse frente atentados contra nuestra persona o nuestros bienes. Con seguridad sanitaria, me refiero a la posibilidad de contraer enfermedades, a ser atendido sanitariamente o a ser repatriado a nuestro país de origen.

Seguridad física

El riesgo cero no existe. Esto es así donde vives actualmente, incluso si consideras que tu país es seguro. Nadie estamos libres de sufrir un asesinato, un secuestro, o que nos roben nuestras pertenencias con mayor o menor violencia. Cada uno tenemos que saber el nivel de riesgo que estamos dispuestos a asumir cuando viajamos a otro sitio. Un buen punto de partida para valorar ese riesgo es tener una idea del riesgo de nuestro lugar de origen.

Para ello, es muy interesante la web Travel Advisory, aunque no debe ser la única fuente de información. Si ves que la puntuación de tu país de origen es más alta que la del país de destino, en principio irías a un país más seguro. Hay que tener en cuenta que esta web recopila las recomendaciones para viajar a los diferentes países del mundo, según los gobiernos de 11 países. Aunque esta variedad de países no está mal para un promedio, hay que tener en cuenta que están influenciadas por las relaciones particulares entre estos 11 países y cada uno de los países evaluados. Por ejemplo, un estadounidense puede tener más problemas para viajar a Irán que un venezolano. Este tipo de detalles hay que tenerlos en cuenta. Por eso, Travel Advisory ha de ser considerada como una primera toma de contacto. No te quedes con la puntuación de esta web. Indaga un poco más los motivos para las puntuaciones que dan cada uno de los 11 países.

Por otra parte, dentro de un mismo país, la seguridad puede variar de una lugar a otro. Es posible que, en una zona turística, te encuentres con más presencia policial para transmitir al viajero seguridad pero, por otro lado, es más fácil encontrarte amigos de lo ajeno en zonas turísticas. Por otra parte, en zonas con poco turismo pueden estar encantados de que inviertas tu tiempo y dinero allí y te traten muy bien… o puede ser que no les gusten los forasteros que, además, viajan con un cacharro caro como un telescopio. Uno nunca sabe, así que lo mejor es informarse sobre la zona y población a la que vas, antes de viajar…

Divertido video sobre «falsos amigos» del español

Para informarse, recomiendo que visites la web Wikitravel, especialmente la página en inglés, que es más completa. En cada destino hay una sección titulada «Stay Safe», en la que tienes indicaciones específicas de lo que tienes que vigilar para estar seguro. Estas recomendaciones pueden ser de lo más variado. Ojo especialmente a ofender costumbres locales o a ofenderte tú por malinterpretar una costumbre. Un mismo gesto con la mano puede significar cosas diferentes en diferentes países aunque tengan una cultura similar ¡imagina si las diferencias culturales son grandes! Tampoco te fíes del idioma. Los «falsos amigos» (palabras de diferentes idiomas que se parecen, pero que no significan nada parecido) también existen en versiones diferentes del mismo idioma de diferentes países ¡o incluso de diferentes regiones de un mismo país! Por todo ello, si conoces a alguien del país de destino que te pueda hacer de guía, mejor que mejor. Ellos son los que saben mejor cómo evitar un conflicto indeseado.

El cannabis es una droga cuya legalidad es muy dependiente de cada país. Foto de Kindel Media en Pexels

No hay nada peor que encontrarte en un país extranjero, detenido sin tener claro el por qué. Se te acusa de algo y, como no conoces el idioma, no sabes el motivo. Además, los procedimientos pueden ser muy diferentes a tu país de origen. ¿Cómo evitarlo? De nuevo: infórmate antes de ir. Cosas como consumir drogas que son socialmente aceptadas en tu país de origen pueden acabar contigo en la cárcel durante más tiempo del que esperarías. O te pueden multar conduciendo (manejando) y no saber por qué. Y ¡ojo con los sobornos! Puede que hayas oído que los policías del lugar de destino buscan ser sobornados pero, si lo ofreces abiertamente, lo mismo se ofenden y es peor…

Pero lo que, sin lugar a dudas, es más interesante para informarse de cara a una planificación, es ver las recomendaciones de tu gobierno para viajar a un país determinado. Para ello, deberás buscar las recomendaciones para viajar a dicho país en la web del ministerio de asuntos exteriores de tu país de origen. No voy a poner aquí las webs de las recomendaciones para viajar de los diferentes países de habla hispana. Si estás leyendo esto, es que sabes usar un buscador ¿no?

Seguridad sanitaria

Antes de emprender un viaje es recomendable averiguar si en el país al que vas hay alguna enfermedad endémica y, si es existe vacuna, recibirla antes de viajar. A veces, esa vacunación es obligatoria para entrar en el país de destino. Esto es algo que no has de dejar para el último momento. Algunas vacunas pueden requerir varias dosis espaciadas en el tiempo incluso varios meses. Pero ¡bueno! estamos planificando un viaje con años de antelación ¿no?

Por otra parte, nadie está libre de contraer una enfermedad o de tener un accidente durante el viaje. Es muy recomendable conocer la posibilidad de ser atendido adecuadamente en el país al que vas. Algunos países tienen acuerdos de reciprocidad que garantizan la asistencia sanitaria pública a los nacionales de los países del acuerdo. Si este no es el caso, considera contratar un seguro médico internacional. A veces, las tarjetas de crédito incluyen este tipo de seguros, así que infórmate bien con tu banco o con tu aseguradora de confianza qué hacer en tu caso.

Ya dentro del país, sigue las recomendaciones locales y de los guías con los que vayas. Estas pueden incluir incluso que no bebas agua que los locales sí beban. Esto es debido a que la microbiota intestinal de los locales está adaptada a esas aguas y la tuya, probablemente no lo esté. No hacer caso de esta recomendación podría desembocar en diarrea. Así que te recomiendo que ignores las posibles burlas de los locales a que tienes un intestino débil.

Un mosquito picando a través de unos pantalones vaqueros
No, los pantalones vaqueros no te librarán de los picotazos de mosquitos. Foto de Egor Kamelev en Pexels

¿Sabes cuál es el animal que más muertes provoca en el mundo? No, no es el gran tiburón blanco, ni el lobo. Son los mosquitos, que pueden transmitir enfermedades con sus molestas picaduras. Si vas a una zona con mosquitos, no lleves repelente anti-mosquitos de tu país. Es preferible adquirir un repelente anti-mosquitos en el país destino porque, a los mosquitos de cada lugar les repelen cosas distintas y, por tanto, es más probable que el repelente local sea más efectivo. Compra el repelente en lugares de confianza como farmacias o donde sea que los compren los habitantes del destino. No los compres en puestos callejeros de zonas muy concurridas por turistas.

En general, es conveniente que te informes de lo que te puedes encontrar antes de visitar el país destino, bien en la página de recomendaciones para viajar del ministerio de asuntos exteriores de tu país, bien en en algún centro de medicina internacional.

Insisto, infórmate, infórmate e infórmate.

Viaje al siguiente eclipse (II): Planteando objetivos

Viaje al siguiente eclipse (II): Planteando objetivos

Introducción

Antes

Imagina que eres una persona que no sabe lo que es un eclipse, que vive en una sociedad que no sabe predecirlos y, un día, notas que el Sol ilumina menos. La gente se alarma. Sales a la calle y notas que se levanta un viento frío. Las aves vuelan deprisa directas a sus nidos. Los perros, alarmados, empiezan a ladrar y aullar. Ahora, la luz del Sol es mortecina y carece de los tonos rojizos del atardecer. De repente, se hace de noche. Levantas la vista y, entre las estrellas, ves que el Sol ha cambiado. Es negro y, en su borde, llegas a ver una pequeña y débil llamarada roja. Pero lo que impresiona más es ese ¿fuego? blanco que parece salir de él. ¿Qué está pasando? ¿Es el fin del mundo?

Algunos se han postrado en el suelo y están rezando. Otros están gritando de miedo. Tú no sabes qué pensar pero sabes que lo que estás viendo no es normal. Sigues mirando al Sol negro cuando, de repente, en su borde, aparecen unos destellos de luz. Al poco, notas que esos destellos ganan en intensidad e, instintivamente, apartas la mirada. Las estrellas han desaparecido. El viento se calma. La temperatura sube. La luz vuelve a ser tan mortecina como antes de que se hiciera de noche. Parece que todo volverá a la normalidad. La gente que gritaba se calma. Los que estaban postrados se levantan y agradecen a la divinidad que les haya escuchado. El fin del mundo será otro día.

Ahora

He oido muchas veces que lo malo de la ciencia es que le quita encanto y magia a los fenómenos naturales. Mi experiencia es la contraria. Saber que todo lo del apartado anterior viene provocado por el simple hecho de que la Luna nueva pasa por delante del Sol, me hace flipar en colores. Y todo con la ventaja de no sentir miedo, sino admiración. Es tan simple que se puede analizar desde diferentes puntos de vista: Dinámica atmosférica, etología, psicología, antropología… Tenemos tanto que aprender de la naturaleza…

Hace muchos años vi un eclipse total y quiero repetir. Quiero volver a experimentar la sensación de irrealidad. Como vimos en la entrada anterior, los eclipses totales de Sol hay que ir a buscarlos. Esa búsqueda requiere un poco de preparación que os cuento a continuación.

Hora y Lugar

Seleccionando el eclipse

Lo primero es ver la página de la NASA sobre eclipses solares. Espero que no se te de mal el inglés. Busca la tabla de eclipses solares de la década que empieza el año que viene (sí, la década ha empezado en 2021, no en 2020).

Página de la NASA sobre eclipses
Fuente: NASA

Un poco más abajo verás el listado de todos los eclipses de la próxima década y, como hemos dicho, nos vamos a centrar en los totales e híbridos. Vamos a probar con el del 4 de diciembre de 2021 haciendo click en la fecha.

Tabla de eclipses solar de la década 2021-2030
Fuente: NASA

Se abre la siguiente imagen:

Datos del eclipse de Sol del 4 de diciembre de 2021
Fuente: NASA

En esta imagen tenemos bastante información. La principal es el dibujo del globo terráqueo con indicaciones. La línea azul oscura con elipses nos indica la franja de totalidad que, como podemos ver, pasa por el Océano Glaciar Antártico y la Antártida. Si tienes ganas de conocer la Antártida, este es un buen momento. Sin embargo, visitar la Antártida es prohibitivo y hace frío a pesar de que el 4 de diciembre es la primavera austral. Pasemos al siguiente: el 20 de Abril de 2023, que es un híbrido.

Datos del eclipse de Sol del 20 de abril de 2023
Fuente: NASA

Como vemos, pasa principalmente por el océano índico y pacífico, tocando el noroeste de Australia, Timor Oriental e Indonesia. En el centro de la franja de totalidad hay un asterisco etiquetado como «Greatest Eclipse». Se trata del punto en el que la duración del eclipse es mayor. Las líneas verdes indican la hora UT (Sin meternos en precisiones, es la hora solar media del observatorio de Greenwich) en la que el Sol va a estar más tapado. Las líneas azul claro indican el nivel de parcialidad que se observará. Estas líneas están separadas a intervalos del 20% de la superficie del Sol tapada. Otro elemento es el asterisco etiquetado como «Sub Solar», que indica el lugar del mundo en el que el Sol va a estar justo sobre las cabezas de los que estén en ese punto en el momento del máximo eclipse. Cuanto más juntos estén los asteriscos, más alto se va a producir el eclipse. No debemos olvidar las líneas magenta, que rodean las zonas en las que el Sol amanecerá con el eclipse empezado, o se pondrá con el eclipse sin finalizar.

Debajo del globo terráqueo, donde pone «Local Circumstances at Greatest Eclipse» se puede ver que la duración máxima de la totalidad es de 1m 16.1s. Si comparamos con la duración de otros totales e híbridos, es bastante poco. Además, vemos que la cantidad de tierra firme es muy pequeña, lo que puede provocar que cazadores de eclipses de todo el mundo copen esta zona. A pesar de que sería interesante conocer unas culturas muy diferentes a la nuestra, quizá sería de mayor interés algún eclipse posterior, como el del 8 de Abril de 2024.

Datos del eclipse de Sol del 8 de abril de 2024
Fuente: NASA

Con casi 4 minutos y medio, este eclipse es mucho más interesante. Además, pasa por México y Estados Unidos, que son dos países culturalmente más parecidos al nuestro que Indonesia o Timor Oriental.

Desde dónde lo observamos

En principio, lo ideal sería ir a verlo en el lugar en que la duración del eclipse sería mayor pero ¿qué probabilidad hay de que esté nublado? Para eso está la página Eclipsophile, que se dedica a hacer estudios meterológicos relacionados con eventos astronómicos. Analiza con minuciosidad los eventos más próximos en el tiempo y tiene un mapa de probabilidad de estar cubierto para los que ocurrirán un poco más adelante. Este es el mapa de probabilidad de estar cubierto de este eclipse:

Probabilidad de estar nublado para el eclipse del 8 de Abril de 2024.
Fuente: eclipsophile.com

Es evidente que el tramo mexicano del eclipse es el que mejores probabilidades de visibilidad tiene. Además, según vemos en la figura anterior, es en México donde se produce la máxima duración del eclipse. Vamos, por tanto, a intentar localizar un bonito lugar de observación en tierras mexicas. Para ello, lo mejor es visitar la página de Xavier M. Jubier, que recopila información sobre los eclipses de Sol. En concreto, tiene enlaces a páginas interactivas de Google Maps para cada eclipse en las que poder visualizar sus trayectorias y poder localizar lugares a menor escala de la que proporcionan los mapas anteriores. Aquí os dejo al mapa del eclipse que estamos analizando. Se puede ver la franja de totalidad como una banda sombreada flanqueada por líneas naranjas. En estas líneas naranjas, la duración del eclipse total es 0. También se ve la línea de centralidad, en azul. Esta línea une los puntos, desde los cuales, se podrá ver que el centro de la Luna nueva pasará por el centro del Sol. Es esta línea en la que la totalidad tiene una duración máxima. Cuanto más cerca de esta línea estemos, mejor.

En el mapa de probabilidad de estar nublado se ve una zona en un azul más oscuro que el resto. Si buscamos en el mapa de Xavier Jubier y hacemos click ahí, nos aparecen las coordenadas del lugar.

Posición interesante para observar el eclipse solar del 8 de Abril de 2024.
Fuente: Xavier M. Jubier

En esta imagen podemos ver bastante información. En primer lugar, en la tabla inferior se puede ver la fecha y hora UT de las diferentes fases del eclipse. La fase MAX es en la que el centro de la Luna nueva está más cerca del centro del Sol. Los otros puntos C1 a C4, son los puntos en los que la Luna nueva «tocará» el disco del Sol. Se llaman contactos y vienen explicados en la siguiente imagen:

Los contactos de la Luna nueva en un eclipse total de Sol.
Fuente: Elaboración propia

En la parte de arriba, en el medio, justo encima de la representación del eclipse, la latitud (26.27552º en mi caso) y la longitud (-103.06271º en mi caso). Busca esos valores, separados por una coma, en Google Maps:

Posición ideal de observación en Google Maps.

Y ¿para qué es útil esto? En primer lugar, ya tenemos las coordenadas del lugar ideal de observación. También tenemos la localización administrativa, que será útil más adelante. El punto está, en Charcos de Risa, Coahuila de Zaragoza, México. Como era de esperar, es un lugar perdido en mitad de la nada.

Sin embargo, aunque este sea el lugar de observación ideal, ver el eclipse desde aquí podría no ser recomendable por diferentes circunstancias de las que hablaremos en la siguiente entrada de este blog.

Viaje al siguiente eclipse (I): Tipos de eclipse

Viaje al siguiente eclipse (I): Tipos de eclipse

Tras el chasco que ha resultado no poder ir a ver el eclipse total de Sol del 14 de diciembre de 2020, toca fijar objetivo al siguiente eclipse. Esta serie de entradas en el blog van a ser una indicación del proceso de búsqueda, con consejos de lo que hay que hacer y dónde buscar la información.

Lo primero es responder a lo que seguro que muchos os estáis preguntando: «¿Buscar ya el próximo eclipse? Pero si acaba de ser el último. ¿A qué tanta prisa?». Ante eso, dos cosas. Lo primero es que los viajes son caros. Cuando estoy redactando estas palabras, no se dónde va a ser el próximo eclipse. Puede ser a unas pocas horas en coche, o puede ser en nuestras antípodas. Y, si es lejos, va a ser caro ir, con lo que más nos vale ir ahorrando. Por supuesto, el motivo principal para ir a ver un eclipse es ese espectacular fenómeno de la naturaleza pero ¿merece la pena un caro viaje de miles de kilómetros para que luego llegues y esté nublado? Pues, aunque parezca mentira, rotundamente sí.

El eclipse va a ser una actividad más de un viaje maravilloso en el que vas a aprender muchas cosas nuevas de un país al que difícilmente vas a volver. Nada más que eso, ¡ya merece la pena!

Pero, antes de ver cómo preparar un viaje así ¿qué es un eclipse?

Eclipses de Luna

Un eclipse de Luna se produce cuando esta pasa por la sombra de la Tierra. Por tanto, el eclipse se puede ver desde cualquier punto sobre nuestro planeta desde el que se pueda ver la Luna. Además, como los eclipses de Luna se producen siempre en Luna llena, la zona de la Tierra desde la que se ve la Luna coincide con la zona de la Tierra en la que es de noche. Dentro de los eclipses de Luna hay de varios tipos: totales, parciales, penumbrales y penumbrales parciales.

Formación de la umbra y la penumbra de la Tierra.
Fuente: Elaboración propia

La sombra de la Tierra no es un círculo negro y ya. Como el Sol tiene un cierto tamaño, la sombra de la Tierra es circular y tiene dos partes concéntricas. Por un lado, la sombra en sí, llamada umbra, que tiene forma de círculo. Por otro lado, está la zona que está parcialmente iluminada por el Sol, llamada penumbra, que tiene forma de corona circular alrededor de la umbra y su oscuridad decrece desde el borde interior al borde exterior.

Umbra y penumbra de la sombra de la Tierra.
Fuente: Elaboración propia

En los eclipses parciales penumbrales, la Luna se sumerge muy poco en esa penumbra. El efecto apenas se nota a no ser que sepas lo que tienes que ver porque la disminución del brillo de la Luna llena es casi imperceptible.

Eclipse penumbral parcial de Luna
Fuente: Elaboración propia

En los eclipses penumbrales, la Luna llena se sumerge completamente en la penumbra, aunque sin llegar a la umbra. Se puede llegar a apreciar que la Luna llena es menos brillante de lo normal pero, para apreciar eso, deberías de estar muy acostumbrado a ver lunas llenas. También es posible que notes el degradado de la penumbra proyectada sobre la Luna llena.

Eclipse penumbral de Luna
Fuente: Elaboración propia

En los eclipses parciales de Luna, esta se sumerge parcialmente en la umbra y se ve claramente como si la Luna llena tuviera un mordisco. Un mordisco de forma circular que ya les indicó a los antiguos que la Tierra era esférica. Este efecto se ve claramente. Supongo que te has dado cuenta que, al ponerse el Sol, este se vuelve rojizo. Eso es porque la atmósfera de la Tierra desvía de su trayectoria los rayos de luz azul (por eso el cielo es azul). Pues esos rayos rojos llegan a iluminar un poquito la Luna y la zona que queda eclipsada se vuelve un poco rojiza.

Eclipse parcial de Luna
Fuente: Elaboración propia

Por último, en los eclipses totales de Luna, esta se sumerge completamente en la sombra de la Tierra. Sin embargo, la Luna llena, aunque mucho más oscura, se sigue viendo porque la luz del Sol se refracta en la atmósfera de la Tierra y es capaz de iluminar un poco la Luna con los rayos rojos que atraviesan la atmósfera. Pero, además, si tienes la suerte de que la atmósfera de la Tierra tenga mucho polvo (como tras una erupción volcánica), podrás ver una Luna roja muy espectacular.

Eclipse Total de Luna
Fuente: Elaboración propia

Pero la pregunta es ¿merece la pena hacer un viaje largo para ver un eclipse de Luna? Cada década se producen unos 9 eclipses totales de Luna. La mitad de ellos los podrás ver desde el lugar donde resides. Si merece o no la pena desplazarte para ver los que no verás desde tu casa, eso ya depende de ti. Para mí, desde luego, no. Se trata de un fenómeno remarcable, pero prefiero invertir mi dinero en algo mucho más espectacular y más raro de ver.

Eclipses de Sol

Se producen cuando la Luna nueva se interpone entre el Sol y la Tierra. Como la órbita de la Luna no es circular, sino elíptica, a veces se producen cuando la Luna está un poco más lejos y otras, cuando está un poco más cerca. Esto da lugar a cuatro tipos de eclipses de Sol: Totales, híbridos, anulares y parciales.

Los eclipses parciales son aquellos en los que la Luna nueva no tapa completamente el Sol. Son los más comunes de ver, aunque no se pueden observar desde todo el lado diurno del planeta. Se queda una luz que tiene la intensidad de un atardecer o amanecer. Sin embargo, en los atardeceres y los amaneceres, el Sol ilumina con un tono dorado-rojizo, pero en un eclipse, esto no ocurre. Por eso se suele decir que la luz de un parcial es como la de un atardecer raro.

Durante los otros tipos de eclipse, siempre hay una zona amplia de la Tierra en la que el Sol solo se eclipsa parcialmente.

Eclipse Parcial de Sol
Fuente: Elaboración propia

Los anulares se producen cuando la Luna nueva está lejos en su órbita. El tamaño aparente de ésta es inferior al tamaño aparente del Sol y, aunque pase por el centro, la Luna nueva no llega a tapar el Sol completamente. El efecto es como el de un eclipse parcial muy oscuro, pero nada más. Existe una estrecha franja del planeta en el que se podrá ver la Luna nueva «dentro» del Sol. Fuera de esta franja, el eclipse se verá parcial.

Eclipse Anular de Sol
Fuente: Elaboración propia

Los eclipses híbridos son similares a los anulares. La diferencia principal es que, en un tramo de la franja, la superficie de la Tierra está lo suficientemente cerca de la Luna nueva que su tamaño aparente es mayor que el tamaño aparente del Sol, teniendo en ese tramo un eclipse total.

Eclipse Total de Sol
Fuente: Elaboración propia

Sin duda, el eclipse total de Sol es el más espectacular. La Luna tapa completamente al Sol, bloqueando su luz. Se hace de noche casi de golpe. Se pueden ver las estrellas y la espectacular corona solar. Ves los «rayos» del Sol (en realidad es la corona solar) saliendo de un disco negro que es la Luna nueva. Aunque sabes exactamente lo que está pasando, el cerebro percibe un Sol negro. Baja bruscamente la temperatura. Se forma un viento. Las aves buscan refugio… Es una sensación que, creo, no puede dar ningún otro espectáculo natural. Experimentas una sensación que sabes que es real, pero que parece no serlo, pero es real, pero nunca has experimentado nada igual, pero es real. Ninguna foto (mucho menos mi dibujo) hace justicia a la espectacularidad del fenómeno.

¿Merece la pena un viaje a ver un eclipse de Sol? Personalmente, creo que ver una totalidad de un eclipse solar es algo que toda persona debería de ver antes de morir. Además, la franja donde se produce la totalidad es estrecha y, aunque haya varios eclipses solares totales a lo largo de una década, la probabilidad de la franja de totalidad pase por tu casa es muy pequeña. Así que sí, sin dudarlo, si puedes ahorrar para viajar a ver un eclipse de Sol, ¡hazlo!

Si has llegado hasta aquí, muchas gracias por tu lectura y espero que leas la próxima entrada en la que veremos cómo seleccionar el eclipse solar que queremos ver.

Twitter y salud pública

Twitter y salud pública

En twitter se ha hecho viral este tweet.
El autor del tweet ya ha admitido que el vídeo es un montaje. Realmente es una animación 3D. Se puede apreciar en varias cosas. Para empezar, la caída de las bolitas no es natural. No parece que tire de ellas la gravedad terrestre. Parece que caen más despacio de lo que deberían. Por otra parte, experimentos como este llevan a que la bolas se distribuyan de forma binomial, es decir, mayor cantidad hacia el centro, y menor cantidad en los extremos. Y, por supuesto está la separación por colores. Tanto el que las bolas se distribuyan de forma uniforme, como que lo hagan por colores, constituyen un doble quebrantamiento de la segunda ley de la termodinámica. Esa que dice que los únicos procesos posibles son aquellos que hacen que la entropía (el desorden) del universo aumente.
Es, en principio, un vídeo inocente. El problema está en su descripción. No se si lo sabéis, pero hay una serie de sectas sanitarias, muy peligrosas, que se aprovechan de personas enfermas para sacarles el dinero. Se aprovechan de personas desesperadas dándoles falsas esperanzas de curación. Les dicen que el origen de sus enfermedades es emocional y, como la mayoría de los conflictos emocionales son con la propia familia, estas sectas acaban separando a sus víctimas de su familia (no vaya a ser que la familia les haga entrar en razón). Ya han habido muertos de personas que abandonaron sus tratamientos médicos porque desde estas sectas se lo propusieron. Hablo de la Nueva Medicina Germánica y sus derivados, de los que avisa la Organización Médica Colegial.
Para dar credibilidad a lo que dicen, usan de excusa la física cuántica. La física cuántica habla de efectos contraintuitivos y que se manifiestan a nivel molecular. Efectos que no se pueden observar a escalas mayores a causa del proceso cuántico llamado decoherencia. Sin embargo, estas sectas sanitarias defienden, sin pruebas de ningún tipo, que esos efectos se manifiestan a escala de personas, aunque ya está demostrado que no es así.
Tweets como este ahondan en la relación entre la mecánica cuántica y las emociones; en los (falsos) motivos de por qué las personas conectan. Usa terminología científica fuera de contexto para llegar a la conclusión absurda de que las personas nos juntamos porque vibramos igual. Esta falsedad, respalda las tesis de estas sectas sanitarias y, por este motivo, tweets tan aparentemente inocentes como este constituyen un peligro de salud pública.
Como se hace un científico

Como se hace un científico

Mientras escribo este texto, ni siquiera se si lo voy a publicar. La verdad es que he empezado diferentes artículos sobre los temas más diversos y, aunque esto se llame Docta Ignorancia, me gusta tener cierta base y rigor en lo que escribo. Por ello, en este artículo, me voy a dedicar a investigar menos y a hablar tanto desde mi experiencia personal, como desde la experiencia de algunos amigos.

Ingredientes

Lo primero que se necesita para hacer un científico es una persona curiosa y con ganas de aprender. Me refiero a una persona que se pregunta por el funcionamiento de las cosas. Podemos decir que es la componente principal del científico, pero que no es exclusiva de los científicos. Lo que quiero decir es que, si conoces a un niño con esa curiosidad, podría ser científico de mayor.

Hay otras características para que un niño se pueda convertir en un buen científico, pero las considero menos importantes. Estoy hablando de cosas como la inteligencia. Personalmente, creo que ser inteligente no es determinante para ser científico, aunque no hay que negar que ayuda. Quizá, más importante que la inteligencia sea la creatividad. Sí, la creatividad. La misma creatividad de un artista porque, lo reconozcamos o no, el trabajo de un científico tiene mucho de arte, como veremos más adelante.

Curiosidad y creatividad. ¿Algo más? Pues… quizá, la paciencia y la perseverancia ayuden. Se ha dicho que la paciencia es la madre de la ciencia. La perseverancia, el no darse fácilmente por vencido, es importante también.

Preparando los ingredientes

Una persona curiosa, creativa y perseverante hacen un ingrediente de calidad para preparar a un buen científico o científica. Pero este ingrediente hay que macerarlo en espíritu crítico. Sí, una persona puede ser muy creativa, pero un científico tiene que ser capaz de cuestionarse a sí mismo. Tiene que ser capaz de renunciar a su propia obra si no le ha salido bien. A lo mejor no es necesario renunciar a ella y es suficiente con algún retoque. Lo cierto es que, una vez presentada la obra al resto de científicos, otros serán los que extraigan los defectos. ¿Por qué? Porque a los científicos nos encanta buscar errores en el trabajo de los otros, no vaya a ser que los otros se lleven un mérito inmerecido y no nosotros, que lo hemos hecho tan bien.

La diferencia entre un artista y un científico estriba en quién decide el éxito de sus obras. En el caso del artista, es su público. En el caso de un científico es la naturaleza. Así se explica que hipótesis que fueron inicialmente rechazadas por los científicos acaben imponiéndose como teorías bien asentadas. La ciencia no es una democracia. La ciencia vive la dictadura de la naturaleza.

A fuego lento

Este ingrediente debe de calentarse lentamente para que absorba los demás ingredientes necesarios para un buen científico.

En el caldo en el que se va cocinando la persona curiosa, creativa, perseverante y macerada en espíritu crítico tiene que haber, sin lugar a dudas, matemáticas.

No estoy hablando de sumas restas, ecuaciones, derivadas e integrales, que también. Estoy hablando de deducciones lógicas. Estoy hablando de llegar, por uno mismo, a unas conclusiones válidas en base a unas premisas que asumimos correctas. Estoy hablando de seguir un razonamiento y saber encontrar sus fallos. La matemática es un conjunto de deducciones y entrenarse en esas deducciones es importante para interiorizar los procesos de razonamiento que necesitaremos después.

Pero hay una parte de la matemática sin la que es imposible hacer ciencia: la estadística. Y no, la estadística no es esa disciplina que dice que, si yo me como dos pollos y tú ninguno, entonces, nos hemos comido un pollo cada uno. Quedarse en eso es como despreciar el peligro de un iceberg juzgando su tamaño por lo que asoma sobre el agua. La estadística tiene dos partes: la descriptiva y la inferencial. La primera nos permite simplificar la realidad para que la podamos entender mejor. La inferencia es la herramienta fundamental en ciencia que nos permite rechazar o aceptar provisionalmente las hipótesis.

Al margen de las matemáticas, está la experimentación. Cuando estamos en ESO o bachillerato, nos explican las conclusiones más relevantes a las que han llegado los diferentes campos de la ciencia. Cuando vamos a la universidad, nos explican los procedimientos mediante los cuales se ha llegado a esas conclusiones. Aprendemos a entenderlos y a verificar por nuestra propia experimentación, que esas leyes que nos cuentan son reales. No, no nos basta con que nos digan que la fuerza de la gravedad es inversamente proporcional a la distancia. Nos ponemos a observar Júpiter y sus satélites y verificamos que eso es así. No nos vale con que nos digan la velocidad de la luz: la medimos. No nos vale con que nos hablen de la evolución. Podemos reproducirla en un laboratorio estudiando bacterias.

Matemáticas y prácticas de laboratorio son las dos cosas que tienen que estar en el caldo en el que se cuece la persona que quiere convertirse en científico. El resto de condimentos son opcionales. Anatomía humana, relatividad, ecosistemas… eso son los diferentes conocimientos ya establecidos que configurarán la especialidad del científico. Conocimientos que un buen científico debería de poder cuestionar y no creer a pies juntillas sin verificar por sí mismo. En mi caso, en primero de carrera, ya me explicaron cosas que percibía como en el límite de lo que se sabe y eso es maravilloso porque percibí que quizá, algún día, yo mismo podría aportar algo, que el conocimiento científico no es algo cerrado, sino muy abierto.

Emplatado

El científico se puede emplatar de muchas y muy diversas formas: No necesariamente trabaja en algo que le va a reportar un Nobel. Muchas veces trabaja en cosas menos relevantes pero igualmente necesarias. Podemos encontrar científicos haciendo trabajo propio de un ingeniero en un área donde aún no hay una rama de la ingeniería establecida. Encontramos científicos investigando el desarrollo de nuevos productos que nos harán la vida más fácil. En algunos países se pueden encontrar científicos asesorando a políticos en las áreas en las que son expertos. Se pueden encontrar científicos trabajando en áreas científicas diferentes a las que correspondería a su formación, aportando un nuevo y productivo punto de vista.

Si encuentra un buen científico, degústelo con curiosidad. Seguro que será un plato con múltiples matices que marida estupendamente con preguntas.